El hogar es uno de los lugares en el que más quemaduras se producen.
Te damos algunos trucos caseros para aliviar quemaduras:
– La miel es un desinfectante de origen natural que puede ayudar a proteger las heridas producidas por una quemadura.
– El aceite esencial de lavanda tiene propiedades analgésicas y antisépticas. Si lo aplicas directamente sobre la herida conseguirás una cierta sensación de alivio.
– El té negro posee ácido tánico, muy útil para calmar y reducir el dolor producido por una quemadura. Si pones varias bolsitas de té negro en agua fría y limpias cuidadosamente la quemadura con ella, conseguirás aliviar las molestias de la quemadura.
– El agua fría es básica en la cura de una quemadura. Una vez lejos de la fuente de calor, es necesario poner la quemadura bajo el agua entre 5 o 10 minutos. Puedes estar más tiempo si el dolor persiste.
– Los beneficios del aloe vera son de sobra conocidos. Una vez la quemadura ya ha sido enfriada con agua fría, aplica directamente el gel extraído de la planta. Sus cualidades analgésicas y astringentes ayudan a calmar la zona y a curar la quemadura.