Ante una quemadura de tercer grado no puedes practicar primeros auxilios en casa. Aunque la lesión no sea extensa siempre requiere la atención de un médico.
En las quemaduras de tercer grado están comprometidas todas las capas de la piel, y los tejidos que se encuentran debajo: vasos sanguíneos, tendones, nervios, músculos, y algunas también pueden llegar a lesionar el hueso.
Este tipo de quemaduras se producen por contacto prolongado con fuentes de calor, fuego o explosiones, elementos cáusticos o químicos, o por electricidad.
Cómo reconocer una quemadura de tercer grado: